Memorias de una gallina

Memorias de una gallina

viernes, 6 de octubre de 2017

Las promesas de mi Señor

Ayer de nuevo, volvió a vociferar que me sacaría del colegio. Gritaba y causaba desorden en el salón. Una tras otra sus amenazas. Hoy tengo que contarles que el hostigamiento persiste, solo por querer trabajar.
Desde pequeña fui una estudiante comprometida y respetaba a mis deberes. Mis padres no recibieron queja de mi comportamiento. Quiero ser agradecida: mis padres han sido la base de mi formación. Mientras, los libros me han dado la satisfacción más grande porque me permiten imaginar, crear y son mis mejores amigos.
Después de algunos años de enseñar instituto, decidí enseñar en el nivel secundario. Me embarqué en este viaje con muchas ilusiones y motivación. Como una aventura, inicié esta travesía para hacer un mundo mejor.

La primera vez que me amenazaron, me persiguieron por todo el colegio y me acusaron injustamente de causar daño a la estudiante, solo porque le dije a la mamá que su hija faltaba a clases y no cumplía con las actividades. En otro colegio, los estudiantes no cumplían con sus deberes, tenían mal comportamiento y las autoridades se hacían de la vista gorda y no pasaba nada. Aunque no respetaron mi trabajo yo seguí haciéndolo
La violencia y las amenazas se han instalado en los colegios y nadie dice nada. No quiero imaginar que pasará en el futuro si se continua así. Con todas mis fuerzas, he invocado al Señor, para pedirle las fuerzas que ya no tengo. Yo creo en las promesas de mi Señor como dice la canción. por eso sigo aquí. Aun sigo enseñando, intentando despertar en mis estudiantes el deseo de aprender, curiosear, investigar y ser mejor cada día. Pero algunos estudiantes me ven como su enemiga, con ensañamiento y alevosía me quieren causar daño. El problema es que son mal asesorados por adultos.

Durante estas últimas semanas, en las cuales las amenazas como una fuerte tormenta cada vez más intensa y destructiva, ha causado una enorme tristeza en mí. Una estudiante me pregunta: ¿Qué me ha pasado? ¿Dónde se fue la sonrisa?

Ahora más que nunca necesito la protección de mi papá. Miro su foto y los recuerdos como olas vienen y van. Cierro mis ojos e imagino que en el cielo: él sigue trabajando. Salí igual a él.

Guardar silencio ya no puedo. Las heridas son profundas. El dolor se nota en mi piel, enrojecida por el stress. El cuello adolorido y mi alma que no cesa de llorar. Cada momento en que sus gritos, sus amenazas intentan golpearme en mi vocación, en mis ilusiones, en mi vida.

Me parece que estoy en la pesadilla que algún momento fue recurrente: caer al vacío y no poder hablar. Pero yo si quiero decir mi verdad, verdad de la que nadie dice en estos tiempos. Los hijos acusan y amenazan a sus padres. Esa realidad, ¡quieren repetirla en el aula! Los maestros que queremos guiarlos, vivimos en esta tempestad de mentira e injusticia y por eso te pedimos ¡Ayúdanos, Señor!

viernes, 15 de septiembre de 2017

Carta a mis estudiantes

Queridos estudiantes:
Hoy les escribo con la esperanza de llegar a sus mentes y sobre todo a sus corazones. Espero que la verdad y la justicia del Altísimo me ampare en estos momentos difíciles.
En primer lugar, quiero compartir  con ustedes que soy maestra por vocación. Me gusta enseñar y me apasiona el lenguaje y la literatura. Los libros son mis amigos inseparables y  me han permitido conocer distintos lugares sin necesidad de viajar, he aumentado mi léxico, saben ustedes que he utilizado en clase esa palabra, he ayudado a muchos estudiantes compartiendo los conocimientos que he ido adquiriendo a lo largo de mi vida.
En segundo lugar, hoy quiero expresarles que sé que son personas con muchas habilidades y talentos y que siento no haber podido persuadirlos para que muestren todo lo que saben. He intentado enseñarles con el ejemplo, ustedes saben que soy puntual y responsable, me gusta leer, investigar, curiosear e intenté buscar nuevas estrategias que me ayuden a ser mejor maestra. Pero solo algunos de ustedes me escuchan. Aunque agradezco a quienes me han dado consejos, me siento bien aprendiendo de ustedes, siempre me gusto ser buena estudiante.
En tercer lugar, quiero contarles que estoy por cumplir el segundo año en el colegio si es que me lo permiten. Quiero contarles que ayer recibí la visita de una madre de familia amenazándome que tenía un video  de cuando yo grito y hago salir fuera del aula a su hijo y que yo soy causante de su baja autoestima, que nunca le llame para darle a conocer  su comportamiento, su rendimiento y que yo no sé de su vida y un largo etcétera.
Ante todo deben saber, que yo no quería estar en el colegio porque las amenazas de estudiantes y padres de familia  y lamentablemente como escuché en una capacitación no hay antecedentes de docentes que son amenazados. Entonces seré la primera. Ya no puedo CALLAR. El año pasado mi madre sufrió un ACV (Accidente CardioVascular) y decidí quedarme un año más, porque así podía trabajar y tenerla cerca para cuidarla. Que es la madre de familia la que me ha causado un profundo dolor: no solo por la amenaza de la que he sido objeto porque me va a acusar a la UGEL y al Ministerio sino por haber dicho que al no ser mamá, yo no me preocupo por su hijo y le he causado daño.
Les cuento estudiantes que me apena escuchar eso de una madre que no sabe que yo me he convertido en la madre de mi mamá y estoy pendiente de sus alimentos y medicinas. Que quiero retribuirle en vida todo el amor y los valores que me dio.
Asimismo, desmentirle porque no soy madre biológica, pero si una tutora-mamá que tiene dos tutorías y que  me he preocupado por mis estudiantes buscando soluciones hablando con ellos, pidiendo ayuda a mis asesores, acompañantes pedagógicos. Pero no he logrado que algunos quieran cambiar y  dejen la indiferencia y la irresponsabilidad. Algunos siguen perdiendo el tiempo, causando daño a quienes como yo queremos trabajar.
 Te pido a ti S que cuentes lo que el hijo de la señora realizaba el día lunes y se jactaba de que me iba a sacar del colegio, se burlaba y lo coreaba con su amigos. Dile a las autoridades, lo que tu sabes, dile a los compañeros que escucharon que no callen, que si ustedes en realidad quieren ejercer su derecho a educarse, empiecen ya y sobre todo no mientan y asuman su responsabilidad.
Les pido a todos mis estudiantes que saben que no he faltado a clases, que cuenten que profesores son  los han amenazado para que no asistan.
Les cuento que alguien robo mi celular nuevo y por eso ya no me he comunicado con algunos padres por medios como el whatshap, messenger, correo electrónico lo cual me ayudaba a tener más contacto con ellos,
Comparto que las autoridades del colegio han tenido conocimiento de la actitud de su compañero, que los demás docentes me han contado o escrito las incidencias del estudiante y aunque sabían de su comportamiento y evasión de clases, la señora madre de familia quiere cubrir con amenazas la irresponsabilidad, dejadez y mal comportamiento de su hijo.
 Me dirijo también a  quien grabo el video, sé lo que han pretendido y me mantengo firme en mis valores y lo que he intentado con ustedes conociendo en el camino que juntaron a todos los repitentes en una sección que este año tiene una evaluación ECE. Sé que no olvidará la palabra parafraseo, sé que identificaran la estructura de los textos y los formatos y para quien me pregunto en clase, para que nos servía la comprensión lectora. Gracias porque te demostré no solo con palabras sino con la realidad lo importante que es leer y comprender. gracias porque a pesar de todo recuerdas lo que te estoy enseñando.
Por último, quiero pedirles que no se dejen vencer, quiero comprometerlos a que luchen y alcancen sus sueños, no importa si en el camino se encuentran piedras, como hoy yo las encuentro. Algo más pido que oren por mí para que no me canse, para que siga sonriendo y celebrando la vida, el amor, la compañía de mis amigos y pueda seguir siendo la mamá de mi mamá y la de ustedes.

Atentamente, M.

domingo, 9 de julio de 2017

Las mariposas de Igo

Igo no puede ocultar su amor por Mada. Desde que la conoció algo cambio en él. Cada vez que la ve su estómago se llena de mariposas multicolores, que recorren todo su ser y forman figuras extrañas en su estómago. Pero, eso no es lo peor. Ya no puede controlarlas y ellas salen a pasear y a gritar su amor.
Cuando se sienten satisfechas vuelven a Igo dejándolo más apasionado, sensible y mimoso.
Entonces Mada sabe que lo tiene todito para él. Ella, celosa y obstinada le pide que la visite.
Todos los días él cumple sus deseos, sin importar lo que le digan sus amigos o sus padres, con tal que ella le regalé sus sonrisa enigmática y aleje sus celos de Hera.

MVI 0864

domingo, 4 de junio de 2017

Vida de burro


Los días se han tornado pesados como piedras. Hoy de nuevo Lino va a trabajar. Se pregunta: y ahora  ¿qué pasará?
 Amenazas, palabras hirientes y mucho dolor.
Por si fuera poco, la mirada de los colegas, azuzando, viendo donde golpear.
Suspira y piensa: ¡qué vida de burro! y empieza a rebuznar, rebuznar hasta que otro pensamiento lo asalta: ¿quién es la bestia?

domingo, 26 de marzo de 2017

¿Por qué me miras así?

Un día gris dibujé en la arena el nombre que me recordaba a ti. Entonces apareció un ser extraño que me mostró unas piedras, a pesar de su asimetría y desgaste, ellas parecían tener un significado para mí, pero no podía recordar. Solo en mi mente empecé a dibujar una planicie tranquila y que me causaba paz.
De pronto, ocurrió un cambio en el paisaje un gato, gato me miraba con ojos muy intensos, me perturbaban.
Gato, gato ¿por qué me miras así? Si a mí me gustan los gatos.
Ahora, ¿qué lo que esta pasando? ¿dónde estoy? No lo recordaba. Seguía con la mirada al gato que iba iniciando una danza suave al caminar y emitiendo unos bufidos como llamando a  otros gatos. Yo me seguía preguntando ¿Qué hago aquí? ¿Esto es un sueño o pesadilla?
No obtenía respuesta. Solo a lo lejos pude percibir el aroma familiar: el desayuno que mamá preparaba los domingos y entonces ya no importó nada más.

Las emociones de un año que se va